La Transición Energética en España
Tras la ratificación tanto del Acuerdo de París como de las actuales directivas europeas, España tiene la obligación de reducir sus emisiones contaminantes y reforzar el papel de las renovables en el mix energético para poder cumplir con el objetivo de energías limpias fijado en un 32% para 2030.
El primer paso para contribuir a esta transformación energética es acompañar a factores estructurales clave como son el económico, medioambiental y social con la viabilidad tecnológica para hacer de la transición una realidad sostenible en el futuro.
Por eso, Siemens se ha centrado en desarrollar la tecnología necesaria para responder a estos nuevos desafíos del sector, tanto a nivel tecnológico como en su competitividad.
Previsiones de la transición energética
El concepto de “transición energética” se define como un cambio estructural a largo plazo en los sistemas energéticos. Actualmente, la transición en curso prevé la sustitución de las fuentes contaminantes por energías limpias además de la progresiva descarbonización y electrificación de la economía.El almacenamiento de energía mundial superará los 10 GWh anuales en 2019. Esto remarca el creciente uso de la electricidad en nuestros días, y el necesario aumento de las instalaciones de almacenamiento energético en el futuro.
Esto es más esencial aún con el uso de las energías renovables. Estas fuentes de energía, al ser dependientes de la meteorología, necesitamos aprovechar el momento de mayor generación y no malgastar dicha energía.
Es por eso que necesitamos tecnologías capaces de recoger la electricidad en exceso para que pueda ser usada a posteriori en momentos de necesidad. De este modo, la energía se almacena de la forma más eficiente posible para que el consumidor pueda utilizarla cuando lo necesite consiguiendo así una mayor calidad en el suministro y la integración de las renovables.
En la actualidad, hay circulando casi 10 millones de vehículos eléctricos en todo el mundo. A lo largo de este año 2019, el BNEF estima unas ventas de 2.6 millones de vehículos más.
Es una tasa del crecimiento del 40%, lo que muestra el gran crecimiento que este sector está mostrando año a año.
Gracias a la gran rentabilidad a largo plazo de los motores eléctricos, la gente empieza a confiar más y más en ellos, apostando por una alternativa mejor para ellos y el medio ambiente.
La demanda en 2018 de Gas Natural Licuado, o GNL, ha incrementado en un 10% hasta alcanzar los 313 millones de toneladas vendidas.
2019 presenta un futuro más prometedor aún, con un crecimiento del 8% llegando así hasta las 340 millones de toneladas.
Aunque ya es un combustible conocido desde hace tiempo, gracias a sufiabilidad y eficiencia, está llamado a ser el combustible de la transición energética, hacia el futuro de la energía eléctrica.
El Internet de las cosas, la inteligencía artificial, robótica, automatización y sensores, son elementos del futuro en los que las industrias están invirtiendo millones. Esta gran inversión hará de las empresas que inviertan en ellas, líderes en sus respectivos sectores.
Hoy en día el 40% del mercado mundial de IoT está copado por la industria, ya que es uno de los aspectos más prometedores. Desde la automatización de procesos, a el gemelo digital y el mantenimiento predictivo, Siemens apuesta por estas tecnologías para dar un gran impulso al sector industrial.
Digitalizar los edificios para reducir la factura de la luz
Pasamos el 90% de nuestra vida en un edificio. Por ello, es fundamental que el consumo que realicemos durante nuestra estancia sea lo menos contaminante y más eficiente posible. Los Edificios Cero Emisiones son las instalaciones con un balance energético cero (Net ZEB, Net Zero Energy Building en inglés).
Estos edificios cuentan con un alto nivel de eficiencia energética, donde la poca cantidad de energía requerida debe proceder de fuentes renovables. Además, debe contar con sistemas digitales capaces de aprender y mejorar los consumos para evitar desaprovechar electricidad o pérdidas por mal aislamiento.
Siemens y la transición energética
El primer paso para contribuir a esta transformación es acompañar a factores estructurales clave como son el económico, medioambiental y social con la viabilidad tecnológica para hacer de la transición una realidad sostenible en el futuro.
Para averiguarlo, debemos saber qué cambios tecnológicos se deben implementar en los próximos 30 años, el coste que ello conlleva y cuándo es el momento adecuado para dar estos pasos.
Para el caso concreto de Alemania, Siemens propone llevar a cabo un plan basado en cuatro pilares: